La comunidad amaneció con una noticia que enluta profundamente a Tierra del Fuego: en la madrugada de este martes falleció Oscar Domingo “Mingo” Gutiérrez, periodista, escritor e historiador riograndense, a los 72 años. Su deceso se produjo tras una larga internación en la terapia intensiva del Hospital Regional, donde permanecía desde hacía varias semanas a raíz de complicaciones en su salud que venía sobrellevando desde hacía un tiempo.
“Mingo”, como todos lo conocían, fue mucho más que una voz reconocible en la radio o una firma habitual en el diario. Fue un constructor de memoria colectiva, un cronista del alma fueguina que supo rescatar, con ternura y rigor, las pequeñas grandes historias que conforman la identidad de Río Grande.
Durante más de cuatro décadas trabajó en LRA 24 Radio Nacional Río Grande, donde su palabra pausada y su mirada sensible se convirtieron en compañía cotidiana para miles de vecinos. También fue el creador de la emblemática sección “Cordón Cuneta” en El Sureño, espacio que se transformó en un archivo vivo de la vida local, con retratos, anécdotas y recuerdos que recorren generaciones.
Su trayectoria combinó periodismo, historia y cultura. Fue concejal durante el retorno de la democracia y director de Cultura municipal, siempre con la convicción de que una comunidad se construye desde la memoria y el afecto. Publicó varios libros, entre ellos “La Candelaria”, “Los Selknam, ausencias y presencias” y “Hasta el próximo recuerdo…”, donde dejó plasmada su pasión por narrar la historia fueguina desde adentro, con la voz de quienes la vivieron.
En 2018 se jubiló de Radio Nacional, pero nunca se alejó del oficio: seguía participando en charlas, entrevistas y proyectos culturales, con la curiosidad intacta y ese humor sereno que lo caracterizaba. Fue declarado Ciudadano Ilustre de Río Grande, reconocimiento que resumió el cariño y respeto que la comunidad siempre le tuvo.
Sus colegas lo recuerdan como un hombre generoso, siempre dispuesto a compartir una historia o una fotografía perdida en el tiempo; un periodista que entendía la noticia no como una primicia, sino como un puente con la gente.
La partida de Mingo Gutiérrez deja un vacío enorme, pero también un legado inmenso: el de haber enseñado que cada calle, cada nombre y cada rostro de esta ciudad cuentan algo sobre quiénes somos.
Los restos de Oscar “Mingo” Gutiérrez serán velados en las próximas horas en Río Grande. La ciudad lo despide con gratitud y con la certeza de que su voz —esa mezcla de memoria, ternura y verdad— seguirá resonando en las historias que él mismo ayudó a conservar.
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